Es la Asociación de Mujeres Musulmanas Ahmadía, una organización auxiliar de la Comunidad Musulmana Ahmadía y nuestro nombre significa siervas de Allah. Su Santidad Mirza Bashir-ud-din Mahmud Ahmad (que Allah esté complacido con él) nos estableció por primera vez en 1922 en India como una organización de mujeres independiente y empoderada, quien fue el segundo líder espiritual mundial de la Comunidad conocido comoJalifatul Masih. Su esposa, Hazrat Amatul Hai (que Allah esté complacido con ella) tenía una gran pasión por el desarrollo y el progreso de la mujer y fue por consejo de ella que inició la organización, que transformó la vida de las mujeres de la Comunidad.

Tal era su entusiasmo por aprender y mejorar las oportunidades para las mujeres, que Hazrat Amatul Hai escribió una carta a Su Santidad (reproducida aquí) antes de casarse con él en la que le solicita que organice clases de religión para mujeres.

Lajna Ima’illah comenzó con catorce miembros y Su Santidad comentó en su lanzamiento:

“Además de obtener conocimiento personal y espiritual, de ahora en adelante el progreso exitoso de la Comunidad también depende de los esfuerzos de las mujeres”.


A lo largo de los años, la organización se extendió por todo el mundo y se formó oficialmente en el Reino Unido de forma permanente en 1957, aunque los principios de Lajna habían sido seguidos durante décadas por mujeres musulmanas áhmadi en el Reino Unido. Había 34 miembros registrados cuando Lajna comenzó en el Reino Unido; la membresía actual es de más de 12,884.

Nuestros principios fundamentales

Nuestros principios fundacionales se centran en la autonomía, las mujeres liderando a las mujeres y trabajando juntas, empoderándose mutuamente.

En concreto, nuestros principios fundacionales son:

Que las mujeres se unan para aumentar sus conocimientos y difundirlos.
Mantener el espíritu de unidad bajo nuestra guía espiritual única de Khilafat.
Trabajar para mejorar cada vez más nuestra moral y espiritualidad.
Ser plenamente conscientes de la responsabilidad de la sana crianza de nuestros hijos.
Independientemente de la posición social, considerar a todas las mujeres como hermanas.
Servir al Islam de manera práctica y ayudar a los hermanos y hermanas que lo necesiten.
Sobre todo tratar de conseguir todo esto a través de la oración.
Todo nuestro trabajo se deriva de la educación y formación espiritual e incluye:

Trabajo de divulgación
Actividades de bienestar social
Esfuerzos industriales y artesanales
Programas de salud física

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